HOSTILIDAD ENCUBIERTA Y EL CLIMA LABORAL

María Eugenia es una mujer en los 40. Ha logrado lo que se propuso en el terreno profesional. Llegar a una posición de liderazgo en una empresa trasnacional no fue fácil y se siente orgullosa al decir que empezó desde abajo. Ahora rememorando sus inicios dice que nunca pensó que lo más difícil era estar en la posición en donde está.

Siempre quiso trabajar para una empresa trasnacional y se empeñó mucho para lograrlo. Fue superando los obstáculos que hubo en el camino pero nada la preparó para este momento. Forma parte de una plantilla de 40 personas que están en un nivel de dirección. El trabajo es demandante pero lo más pesado es relacionarse con personas de las cuales tienes que estar cuidándote las espaldas. Es tan agotador, afirma en la consulta, que está pensando en irse pese a que sus jefes la consideran un profesional de alto nivel. El clima en las empresas está determinado por la dinámica en las relaciones, los lineamientos que se hayan establecidos para que las interacciones sean lo más sanas posible. Hasta dónde el clima en el trabajo puede afectar la salud de un trabajador y cómo combatir esto. Las relaciones en el trabajo son dinámicas. Se basan estrictamente en las actividades que hay que hacer, todos por muchas diferencias que tengan están en el mismo equipo. Entonces cómo es posible que personas como María Eugenia, un profesional de alto nivel, formado en la empresa, valioso, esté planteándose la renuncia. Cuando nos comunicamos por mucho que hablemos, solo diremos un uno por ciento y lo demás lo expresamos con actitudes, acciones, gestos que están revelando lo que no se ve pero se transmite, las emociones y pensamientos y estos tienen una frecuencia electromagnética que va a influir de forma armónica o no en el clima en las organizaciones. Este aspecto no se medía hace varios años, después que se desarrolla el termino de inteligencia emocional en las organizaciones se hacen programas basados en competencias blandas para elegir al personal, sin embargo, aún así, según mi perspectiva, sigue habiendo una brecha que superar en las relaciones en el trabajo. Tengo una experiencia de un poco más de una década en empresas, desempeñándome en el área administrativa y de recursos humanos antes de trabajar por mi cuenta. Después he acumulado experiencia con las personas que vienen a la consulta motivadas por situaciones laborales. He apoyado a personas que trabajan para empresas privadas y públicas en empresas locales y trasnacionales, en mi país y en otros así que me considero alguien con una visión amplia en el tema. Resumo mi experiencia afirmando que en las dinámicas de comunicación hay aún mucho qué aportar para mejorarlas, para que los que forman parte de una organización se sientan satisfechos. Desde mi perspectiva la principal causa de un clima laboral negativo son las actitudes que se expresan a través de una hostilidad encubierta. La persona no muestra su descontento, malestar, disgusto por diferentes razones que resumen sus creencias, expectativas pero que lo sustentan con comportamientos poco profesionales ante sus compañeros generando así una tensión que no es directa pero que se siente y que al final del día lleva a la persona a llegar a su casa agotada, no tanto por lo que hace, sino porque la energía de hostilidad en el ambiente que causa una congestión en la mente consciente generando una tensión al cuerpo. La suma de esto a lo largo de los años causa enfermedad, insatisfacciones hasta perdidas porque una cosa conlleva a la otra. Esta energía discordante mantenida a través de la hostilidad encubierta no es tomada en cuenta pero cuando se evalúan los procesos productivos se puede medir en los retrasos, la falta de orden al ejecutar acciones, perdida de recursos, daño de equipos inclusive porque la energía discordante va a tener un efecto en los equipos electrónicos. No se va a referir esto en la dirección porque no se considerará como un factor responsable de la baja productividad, perdida de recursos, malas gestiones. A lo largo de los años he observado que esta reactividad es mayor en empresas públicas donde los trabajadores a veces gozan de mayor comodidad para hacer sus funciones y se evidencia además en la calidad del trabajo en que aumenta el número de empleados de reposo por enfermedad y muerte. Es importante que se tomen en cuenta la energía que hay en las experiencias para dar una solución efectiva a estos problemas que afectan en general a las personas que van a trabajar a empresas. Los últimos años se ha abierto un mercado laboral a nuevas profesiones que antes no existían motivado por la búsqueda de calidad de vida. La gente se plantea sentirse satisfecha haciendo lo que hace. María Eugenia después de 15 años laborando en un puesto de dirección finalmente renuncia. Para ella fue un desafío romper con la idea que tenía los últimos 20 años, un cambio de visión pero ahora en su casa, planteándose hacia dónde se va a dirigir de ahora en adelante esta considerando el emprendimiento como una opción pero no tiene idea de qué.