EL TIEMPO DE DESARROLLAR LA VOLUNTAD

"La creación de pensamientos, a través de construcciones verbales, activa la voluntad y la autonomía en 

la expresión de ideas." M.M.

Photo captured by Jeff Carson

Ana Luisa es una mujer con un fuerte temperamento, independiente, exitosa, aún sigue soltera, todos creen que ella ama tanto su libertad que no la sacrificaría por nada ni por nadie.

No todos saben lo que sucede en su vida personal, siempre es escurridiza y se sale por la tangente cuando le pregunta, tiene amistades, estas también creen que a Ana no le falta nada, ella se ve tan feliz y plena.

En una consulta, Ana revela que su vida no es tan perfecta como se esfuerza en aparentar, ha tenido varias relaciones, pareciera que siempre es el mismo personaje, tienen las mismas características, hasta se han parecido físicamente, ella insiste en que a la mayoría los conoció fortuitamente, así que sólo puede atribuir su situación a la mala suerte.

En su deseo interno, quiere ser mamá, claro que le da temor, lo ha pensado, lo que no lograr poner en orden es el tiempo que le dedicaría a una familia y en el último caso, un hijo.

A esta altura ha aceptado su destino, será quedarse sola, mira al profesional sentado del otro lado.

  

El tiempo desarrolla la voluntad. Al comunicarnos con nuestras emociones hacemos que lo que queremos se precipite. Elegir es un reto de la personalidad, se hace al expresar lo que queremos desde lo que sentimos, tal vez desconocemos que activamos procesos en los chakras, pero así lo ignoremos, es lo que sucede.

Para impulsarse con las emociones hay que establecer un vínculo emocional con lo que se expresa verbalmente. Astralmente, nos originan emociones en una magnitud infinita. El espíritu esta activo en nuestras emociones, es la experiencia que eleva al espíritu sosteniendo un plan energético, que se alcanza, cuando se ponen en orden las situaciones que se vienen a aprender.

Estar consciente, despierto, hace que los aprendizajes que sostienen este plan energético se active. Para activar estos aprendizajes, hay que construir circunstancias que estén astralmente balanceadas en forma dimensional, usando conscientemente la voluntad para guiarse hacia experiencias armónicas, placenteras y esperanzadoras.

Esforzarse por desarrollar una verdadera voluntad es lograr una autonomía en las situaciones y circunstancias de máxima libertad. Cuando elevemos la forma como nos definimos a nosotros mismos, Yo soy, nos daremos cuenta de cómo nos hemos limitados al razonar a través de nuestras expresiones verbales. El reto de definirse es individual, por eso la experiencia como elemento principal del reto, se experimenta muchas veces.

Definitivamente hay que reflexionar en lo que se habla y en lo que se escucha, aquí es donde originamos las experiencias, el proceso de las experiencias es un evento causado cuando lo definimos desde nuestra expresión verbal. Si nos escuchásemos más a menudo, veremos la magnitud de las situaciones que hemos creado. Tenemos que despertar, quitarnos la mínima dependencia de pensamientos que expresamos sin escucharnos.

Pese a ello, tenemos la opción de reinterpretar las emociones que tuvimos a través de procesos de reflexión, si elevamos nuestra percepción de las cosas, viéndolas con emociones que nos estimulen, le damos una magnitud a las cosas para maximizarlas.

Cómo podemos hacer esto. Activando el Yo Soy Voluntad, sintiendo nuestra voluntad. Las sensaciones que sentiremos, despertaran un proceso energético que balanceará los aprendizajes en toda su magnitud, dándonos la oportunidad de reinterpretar las experiencias para que  fluyan en una  magnitud que determine nuestra voluntad en nuestro entorno.